viernes, 27 de febrero de 2015

Durante mucho tiempo, el mar ha sido utilizado como un vertedero accesible y barato, con capacidad infinita, donde podían ir a parar todo tipo de sustancias. De estas sustancias, el petróleo supone una de las fuentes mas importantes de contaminación: al año llegan al mar entre 2,5 y 3,5 millones de toneladas de las que la mayor parte procede del medio terrestre como consecuencia de los residuos de las ciudades costeras; el resto llega por vertidos directos al mar debido a operaciones de funcionamiento, limpieza de tanques o accidentes de petroleros.




En la costa española, desde la década de los 50, han tenido lugar 30 accidentes de petroleros, 11 de los cuales derramaron más 10.000 toneladas, y la mayor parte de ellos se produjeron frente a Galicia. Este hecho es fácilmente explicable teniendo en cuenta que por la costa gallega se mueve el 70% del petróleo que entra o sale de Europa y sus aguas son surcadas anualmente por más de 14.000 buques transportando petróleo y otras mercancías peligrosas.